La limpieza de ladrillos a la vista no es sólo necesaria para mantener una perfecta estética de esta estructura. También es vital para que esta esté en perfecto estado y no se originen problemas en su superficie debido a la acumulación de suciedad o moho.
A lo largo de este artículo, te contaremos cómo limpiar ladrillos vistos, el tipo de fachada más habitual en viviendas particulares y edificios de todo tipo. ¿Te quedas con nosotros para descubrir todos los trucos?
¿Por qué es importante limpiar los ladrillos cara vista?
El ladrillo a cara vista es uno de los materiales más empleados en la construcción. Es una opción muy segura y eficiente si bien, por su textura porosa, con el tiempo acumula suciedad en sus recovecos.
Ante este inconveniente la solución es sencilla, y es la de hacer mantenimientos periódicos para que esté siempre en perfectas condiciones. Esta limpieza frecuente debe hacerse tanto en exteriores como en interiores, donde este material puede acumular grasa, hollín u otros restos de suciedad.
Para que puedas conservar tus ladrillos vistos por mucho más tiempo, te daremos una completa guía con consejos de limpieza. Con ellos no sólo disfrutarás de una superficie impecable, sino que también contribuirás a conservar la integridad estructural de los muros.
Técnicas para limpiar ladrillos vistos en exteriores
En estas líneas te hablaremos tanto de métodos que van desde los más básicos pero eficientes como de otros profesionales, pensados para su realización por empresas especializadas.
En Obras y Proyectos Aria somos especialistas en la limpieza de fachadas, por lo que no dudes en consultarnos tus dudas y en contratar nuestro servicio para que podamos ocuparnos de tus muros de ladrillo visto.
Limpieza con agua y cepillo
Se trata de un tipo de limpieza de ladrillos vistos superficial pero suficiente para retirar cualquier resto de polvo y suciedad ligera que pueda haberse acumulado en los ladrillos. Para llevarla a cabo, basta con usar un cepillo de cerdas suaves o un aspirador con el accesorio para superficies.
Con este elemento, se conseguirá eliminar el polvo para después, con ayuda de un paño húmedo y agua, dar una pasada por la pared para acabar con toda la suciedad. Para un mantenimiento rápido y regular, es siempre una buena opción.
Chorro de arena
Con el paso del tiempo y la acción de los agentes externos es normal que las paredes de ladrillos exteriores pierdan su textura original. Con la técnica del chorro de arena no sólo se consigue limpiar una pared en profundidad, sino también que el ladrillo recupere su apariencia.
En este caso, el arenado es un método de limpieza que debe ser aplicado únicamente por profesionales del sector de la limpieza de fachadas. El motivo principal es que, mal ejecutado, puede dañar la superficie a tratar.
Sin embargo, se trata de un método muy recomendado, ya que ayuda a eliminar recubrimientos que se hayan aplicado de forma posterior a la construcción de la pared.
Hidrolimpiadora
Este tipo de herramienta ofrece una limpieza ágil, gracias a su versatilidad y potencia. En función del nivel de suciedad que acumule la pared, este sistema puede ajustarse para modificar la presión del agua.
Así, se podrá eliminar desde la suciedad más simple hasta el moho, pasando por los residuos más incrustados, todo ello en un tiempo inferior al que se emplearía con una limpieza manual, la cual conlleva también un mayor esfuerzo.
Por otro lado, el uso de hidrolimpiadoras elimina la necesidad de utilizar productos químicos para limpiar ladrillos vistos colocándose como una alternativa eficiente y respetuosa con el medioambiente.
Consejos para mantener los ladrillos vistos
Ahora que ya sabes con qué limpiar los ladrillos vistos, queremos darte unos consejos para que estén siempre perfectos.
- Llevar a cabo una limpieza regular. Puede sonar redundante, pero realizar una limpieza superficial cada pocos meses puede evitar que se acumule la suciedad en exceso.
- Evitar el uso de productos abrasivos. A la hora de limpiar ladrillos a la vista es vital no utilizar ácidos fuertes ni químicos agresivos, ya que pueden dañar tanto el propio ladrillo como las juntas entre los mismos.
- Aplicar selladores. Si se trata de paredes o muros exteriores, un correcto mantenimiento de su superficie implica la aplicación de un sellador impermeabilizante. De esta forma se evitará que la humedad entre a través de los ladrillos y no dé lugar a la aparición de manchas de moho.
- Evita la acumulación de humedad. En caso de que la pared de ladrillo visto sea interior, es aconsejable controlar el ambiente de la estancia. En este sentido, se puede utilizar un deshumidificador en zonas donde los niveles de humedad sean altos a fin de evitar problemas de aparición de moho.
Además de estos consejos para proteger el muro de ladrillo, es conveniente también contar con protección para uno mismo. Los guantes y gafas son esenciales para proteger las manos de la humedad y los ojos de las salpicaduras.
Las paredes de ladrillo visto son muy populares, tanto en exteriores como en interiores, y es que aportan carácter, sobre todo si se utilizan dentro del hogar. Llevan décadas siendo la parte visible de todo tipo de edificios y se trata de una tendencia que sigue vigente en la actualidad.
Gracias a este artículo ya conoces los métodos más frecuentes para limpiar ladrillos vistos, todos ellos rápidos y eficientes. Algunos de ellos deben ser llevados a cabo por profesionales por lo que no lo dudes más y contacta con nosotros para que podamos ayudarte a recuperar el esplendor de tus paredes o fachadas de ladrillos.