¿Fachada ventilada o SATE?

El cerramiento de fachadas ofrece variadas opciones, con características y precios diferentes. Ante una gran oferta de sistemas constructivos, en ocasiones nos pueden surgir dudas y nos preguntamos cuál es la mejor opción, si fachada ventilada o SATE.

Para resolver estas dudas, hoy te contaremos cuáles son las especificaciones técnicas de cada uno de estos tipos de revestimientos para fachadas y cuál es más conveniente según el tipo de obra o el presupuesto del que se disponga.

Te hablaremos de dos sistemas completamente diferentes, pero que tienen en común que están ideados para evitar la pérdida de energía en edificios y viviendas particulares. ¿Quieres saber cómo?

¿Qué es una fachada ventilada?

Se conoce como fachadas ventiladas a aquellos cerramientos que contribuyen al ahorro de energía y a la sostenibilidad en los edificios. Lo hacen gracias a su estructura, y es que este sistema está compuesto por tres partes principales.

La primera de ellas es el muro soporte, un elemento que puede ser aislante por sí mismo o sobre el que se podría instalar una capa de aislamiento térmico. Destaca de este método para cerrar fachadas el material exterior, el cual se fija por medio de una estructura portante.

Para garantizar su eficacia, entre ambas capas se crea una cámara de aire que, al no ser estanca, permite que el edificio se ventile.

¿Cómo funciona una fachada ventilada?

Gracias a la estructura de la fachada ventilada y a la diferencia de temperatura entre el interior y el exterior de un edificio, este sistema produce un fenómeno de convección de forma natural, conocido como ‘efecto chimenea’.

De esta forma, el aire caliente se transforma en aire más frío en verano y, en invierno, la capa aislante retiene el calor que tiene su origen en el interior del edificio. Nos encontramos, en definitiva, con un tipo de fachada sostenible, con el que se propicia una reducción del consumo energético.

Ventajas de las fachadas ventiladas

La instalación de fachadas ventiladas presenta varias ventajas. Como ya hemos visto, sobresale el ahorro energético que brindan, de entre un 30 y un 40% en el total de las facturas, pero también otros beneficios de los que te hablaremos a continuación:

Mediante su cámara de ventilación, se consigue un entorno más saludable. Mejora el aislamiento térmico y acústico y se genera un mayor confort a los habitantes del edificio.
Evitan la condensación y la humedad proveniente tanto del interior como del exterior del edificio. Por otro lado y debido a la cámara de aire, se crea una protección completa contra filtraciones de agua en la fachada.
Este sistema constructivo no necesita apenas mantenimiento, aunque conviene realizar una limpieza periódica de la cámara de aire.
Las fachadas ventiladas para casas o edificios ofrecen paneles fabricados en diversos materiales, con resultados finales de fachadas ventiladas cerámicas, fachadas ventiladas de piedra o fachadas ventiladas de madera.
Las fachadas ventiladas son viables para su instalación tanto en proyectos de nueva construcción como en obras de rehabilitación de edificios en Madrid.
Dada la ventilación constante que se lleva a cabo en el interior de la cámara de aire de este sistema, se consigue mantener seca la fachada, lo que alarga su vida útil.
Aunque se trata de un sistema constructivo con un precio más elevado que el resto, la instalación de una fachada ventilada se acaba amortizando, a causa de su eficiencia, su durabilidad y el aumento de valor que adquiere con ella el edificio.

¿Qué es el SATE para fachadas?

Los Sistemas de Aislamiento Térmico por el Exterior, más conocidos como SATE, es otro de los tipos de cerramientos para fachadas más utilizados en la actualidad. Al igual que la fachada ventilada, el SATE tiene la función de evitar la aparición de puentes térmicos en cualquier edificación y de mejorar su inercia térmica, contribuyendo a su habitabilidad y el ahorro energético.

¿De qué se compone este sistema? El SATE está formado por una capa de mortero adhesivo, la cual se coloca sobre el soporte del edificio. Por otro lado, implica también la utilización de un material aislante, que puede ser de poliestireno expandido, corcho o lana mineral. Tras esta capa, se instala otra más de mortero, esta vez reforzada con una malla de fibra de vidrio. Por último, se da una capa final de imprimación y se impermeabilizan las placas.

¿Cómo se instala el SATE?

Si hay un sistema fácil, rápido y cómodo en lo que a su instalación se refiere, ese es el SATE. Este revestimiento para fachadas está compuesto por paneles aislantes prefabricados que se colocan adheridos al muro de la fachada mediante su fijación con adhesivo. Instalar este revestimiento no requiere de muchas horas de trabajo y, por tanto, de un alto presupuesto para la ejecución de esta obra.

Beneficios de instalar SATE

A la mejora del confort térmico y a la minimización de los puentes térmicos, se suma que el SATE cuenta con un mayor número de ventajas derivadas de su instalación:

Al renovar la fachada por el exterior, el SATE revaloriza las viviendas y edificios, aumentando su valor en el mercado.
Reduce el riesgo de que se produzca condensación, hongos o moho, ya que el cerramiento permanece siempre a una temperatura cálida y no requiere de la instalación de cámaras de aire. Por otro lado, el SATE es un sistema totalmente impermeable, por lo que elimina la posibilidad de que existan filtraciones de agua.
Hace que la fachada no se deteriore y, además, no reduce la superficie útil de las viviendas, al ser un sistema que se coloca en el exterior del edificio.
El SATE aísla térmicamente, pero también acústicamente, por lo que aumenta el confort en el interior de las viviendas al reducir el molesto ruido exterior.
Es ignífugo, con una alta resistencia al fuego que lo clasifica como un material A1.
El SATE es duradero, pudiendo estar en perfecto estado durante toda la vida útil del edificio.
Se trata de un sistema constructivo para el cerramiento de fachadas de simple instalación. Esto hace que resulte económico, sobre todo frente a sistemas como las fachadas ventiladas.

¿Qué es mejor, SATE o fachada ventilada?

Fachada ventilada o SATE, esa es la cuestión. Cuando se trata de rehabilitar una fachada o de escoger el sistema constructivo que se instalará por primera vez, es primordial conocer todas las funcionalidades de cada uno de ellos.

Ambos ofrecen unas prestaciones similares, aunque bien es cierto que el SATE se ha convertido en una de las alternativas más populares de los últimos años en el sector de la construcción. Lo ha hecho por méritos propios, y es que se trata de un sistema que no conlleva una instalación complicada, lo que acaba repercutiendo en su coste final, mucho más bajo que el de las fachadas ventiladas.

En definitiva, un sistema SATE supone unos mayores ahorros en el futuro, ya que no solo es más económico, sino que también es altamente eficaz, favoreciendo el ahorro de energía de las viviendas o edificios en los que se instala.

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